top of page
Buscar

ENTRENAMIENTO FUNCIONAL PARA PRINCIPIANTES

  • Foto del escritor: Andre Mariscal Valladares
    Andre Mariscal Valladares
  • 27 feb
  • 5 Min. de lectura

El entrenamiento funcional es una de las mejores maneras de mejorar la fuerza, la movilidad y la resistencia en el día a día. Sin embargo, muchas personas sienten miedo o inseguridad al comenzar. Quizás piensan que necesitan estar en forma antes de intentarlo o que los ejercicios son demasiado avanzados. La realidad es que el entrenamiento funcional es accesible para todos los niveles y se adapta a las capacidades individuales.


Si estás interesado en comenzar pero tienes dudas, este artículo te ayudará a entender qué esperar, cómo avanzar de forma segura y cómo mantenerte motivado en el proceso.


¿QUÉ ESPERAR EN LAS PRIMERAS SESIONES?

Si nunca has hecho entrenamiento funcional, es normal preguntarte cómo será la primera sesión. Generalmente, incluirá lo siguiente:


  • Calentamiento y movilidad: Se inicia con ejercicios de movilidad para preparar las articulaciones y evitar lesiones.



  • Ejercicios básicos: Movimientos como sentadillas, desplantes, empujes y jalones son comunes. El orden y la selección de ejercicios dependerían de la rutina principal que se tenga programada para cada día.



  • Progresiones seguras: En caso de que la rutina implique ejercicios de un nivel más elevado, no te preocupes, ya que no necesitas hacer ejercicios avanzados de inmediato; todos los ejercicios pueden ajustarse a progresiones más sencillas con las que puedes empezar y poco a poco irás desarrollando la condición física necesaria para realizar movimientos cada vez más retadores.



  • Ambiente amigable: Un buen gimnasio de entrenamiento funcional te hará sentir en un espacio cómodo y seguro, contando con el apoyo de los entrenadores y de tus mismos compañeros.



PROGRESIÓN Y ADAPTACIÓN

Uno de los miedos más comunes es pensar que será demasiado difícil. Sin embargo, el entrenamiento funcional está diseñado para que cualquier persona pueda empezar desde su nivel actual y mejorar progresivamente. No importa si eres más avanzado en edad e incluso que nunca antes hayas hecho ejercicio. La idea es partir de lo que podemos hacer en este momento y poco a poco ir ganando fuerza, resistencia y habilidad corporal.


  • Pequeños avances marcan la diferencia: Al principio, notarás cambios en tu resistencia y coordinación antes que en la fuerza. Es totalmente normal, son adaptaciones neurológicas necesarias para progresivamente poder cargar más peso y volvernos más fuertes con el paso del tiempo. Lo mejor del entrenamiento funcional es que cada día te sentirás más hábil para realizar movimientos que tal vez antes no hubieras imaginado poder lograr. Eso te mantendrá motivado a seguir ejercitándote y eventualmente alcanzar niveles más altos de atletismo y rendimiento físico.


  • El progreso no es lineal: Habrá días en los que te sentirás fuerte y otros en los que no. Es parte del proceso. Habrá temporadas más duras que otras, pero eso es parte de la vida. La constancia es clave, tanto en el entrenamiento como en cualquier otro aspecto de la vida. Mientras tengas un propósito claro por el cual estás entrenando, debería de ser suficiente para mantenerte firme y seguir dando tu mejor esfuerzo. De ser posible, anota la razón por la que estás haciendo ejercicio y tenlo a la mano o a la vista en tiempos difíciles.



  • Frecuencia recomendada: Muchas veces queremos empezar con todo, pero hacer más no necesariamente es mejor, y particularmente esto es cierto cuando se trata de iniciar con actividad física después de estar un tiempo prolongado en modo sedentario. Para evitar lesiones, sobrecargas o simplemente amanecer muy adolorido al día siguiente, se recomienda empezar con 2 a 3 sesiones por semana para avanzar de manera adecuada y darle a nuestro cuerpo la posibilidad de recuperarse y de irse adaptando progresivamente a los entrenamientos. Después de 3 o 4 semanas así, entonces podrás empezar aumentando la frecuencia de entrenamiento, así como la intensidad y dificultad de los ejercicios.


ERRORES MÁS COMUNES Y CÓMO EVITARLOS

Cuando comienzas algo nuevo, es fácil cometer errores. Estos son algunos errores comunes en etapas tempranas de entrenamiento:


  • Exigir demasiado al cuerpo: No intentes levantar mucho peso o hacer demasiadas repeticiones desde el primer día. La técnica es más importante. Además, al ser un estímulo nuevo, es posible que tu cuerpo resienta los siguientes días el desgaste muscular, que, en caso de haber sido excesivo, podría costarte trabajo hacer incluso actividades cotidianas. Esto no es necesariamente bueno, por el contrario, esto nos habla de una inflamación excesiva causada por un sobreesfuerzo al que nuestro cuerpo no debió ser sometido en primer lugar. Tómate tu tiempo y lleva las cosas con calma. Además, será más sencillo asociar el ejercicio con una actitud positiva si logras disfrutar cada sesión.


  • Descuidar la técnica: Un movimiento mal ejecutado puede generar molestias o lesiones. Escucha las indicaciones del entrenador y a tu cuerpo también. La técnica es la parte más importante de cualquier movimiento. Sin una base sólida no podemos esperar buenos resultados. Vale más hacer un ejercicio con peso ligero pero bien hecho, que sobrecargado pero con mala postura o técnica. Esto último puede ser perjudicial para la salud articular y también puede provocar estancamiento en el desarrollo del alumno.


  • Compararse con otros: Cada persona está en su propio proceso. Lo importante es mejorar según tu propio ritmo. Está bien que te inspires en otras personas, pero recuerda que cada quien vive una situación diferente. En este sentido, debes enfocarte en ti, en tu progreso y en reconocer tus logros para seguir avanzando. Verás que cuando menos lo pienses, ya estarás en un nivel completamente diferente a como empezaste. Además, recuerda que estés donde estés, siempre habrá alguien más hábil que tú, y también alguien menos hábil que tú. Aprende a reconocer cada situación para ayudarte con quienes tienen más experiencia, pero también para ayudar a quienes tienen menos experiencia que tú.


EN CONCLUSIÓN...

El entrenamiento funcional no es solo para atletas o personas con experiencia previa en ejercicio. Cualquiera puede comenzar y experimentar sus beneficios con la orientación adecuada. No dejes que el miedo te detenga: el primer paso siempre es el más desafiante, pero también el más gratificante.


Si quieres intentarlo, acompáñanos en una clase muestra y descubre por tu cuenta lo que el entrenamiento funcional puede hacer por ti.



REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS


  • Resende-Neto, A. G., Dantas, E. H. M., & da Costa, J. S. (2016). Entrenamiento funcional: conceptos y beneficios. Revista Científica del Núcleo de Conocimiento. Recuperado de https://www.nucleodoconhecimento.com.br/educacion-fisica-es/entrenamiento-funcional

    Este artículo analiza los conceptos y beneficios del entrenamiento funcional, destacando su impacto positivo en la masa muscular, fuerza, resistencia cardiorrespiratoria, flexibilidad y equilibrio.


  • García, M. A., & García, M. L. (2016). Entrenamiento funcional del core: eje del entrenamiento inteligente. Revista de Entrenamiento Deportivo, 30(3), 23-28. Recuperado de https://www.researchgate.net/publication/291554383_Entrenamiento_funcional_del_core_eje_del_entrenamiento_inteligente

    Este artículo revisa la importancia del entrenamiento funcional del core para optimizar el control postural, mejorar el balance y la ejecución de actividades diarias.


  • Harvard Medical School. (s.f.). Entrenamiento funcional: mejora fuerza y movilidad. Bupa Salud. Recuperado de https://www.bupasalud.com/salud/entrenamiento-funcional

    La Harvard Medical School discute los errores comunes a evitar al practicar ejercicios, incluyendo la importancia de un calentamiento adecuado antes de iniciar cualquier rutina de entrenamiento funcional.

 
 
 

1 comentario


Rafael Silva
Rafael Silva
28 feb

Muy buen artículo. Gracias por compartir

Me gusta
bottom of page